CALIDAD: Mejora continua basada en la aplicación de procesos.
INDEPENDENCIA: Autonomía en su gestión e independencia de los poderes públicos y privados.
PROFESIONALIDAD: Equipo interprofesional de alta cualificación en los servicios de tutela.
INTEGRACIÓN: Normalización de la vida social de las personas que tutelamos.
JUSTICIA: Protección de los derechos e intereses de las personas con enfermedad mental que tutela.
TRANSPARENCIA: Información completa, clara y veraz en sus actuaciones e intereses.